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Actualmente, el sistema más empleado... básicamente por su bajo precio y fundamentalmente por la enorme presión que ejercen la mayoría de
profesionales al considerarlo como "fácil". |
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Una breve introducción: (por favor, si quieres ir directamente a los temas técnicos de este apartado, puedes pasar directamente a los enlaces que verás abajo del todo) |
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Desde que en 1775 K.W. Scheele descubrió el cloro hasta la época actual, los usos y aplicaciones basadas en el cloro han ido aumentando,
y se prevee que seguirán aumentando a lo largo de las próximas décadas (eso sí, con algo más de "sensibilidad" ecológica que hasta ahora).
En las piscinas, se emplea poco después de que lo hiciera en
los tratamientos del agua de saneamiento pública, hace más de un siglo atrás. |
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En la actualidad, los productos para tratamiento de piscinas que emplean CLORO son muy variados y muy, por decirlo de alguna forma... "Variopintos".
Generalmente se basan todos en el empleo del TRICLORO (en formato de tableta compactada y granulado), el DICLORO (idem), el HIPOCLORITO SODICO (en formato líquido) y el HIPOCLORITO CALCICO (en sólido).
Partiendo de la base del TRICLORO, se comercializan muchos productos para el tratamiento de piscinas: los más conocidos son las tabletas de cloro de disolución lenta, y los tan últimamente (por desgracia) famosos cloros
"multifuciones", "multiefectos", etc...
Sea como sea, los anteriores productos son denominados "donantes de cloro". Esto es, dado que el cloro en su estado natural, es GASEOSO. Así pues, se emplea ácido
isocianúrico como medio de "transporte" para los Dicloros y los Tricloros, Sodio, para el Hipoclorito Sódico o Calcio para el Hipoclorito Cálcico.
Así pues, las concentraciones de cloro "útil" (es decir la
cantidad de cloro "real" que aportan al agua) varían de uno a otro, dejando algunos productos residuales una vez empleados. Cada uno de ellos con sus ventajas o inconvenientes...
Sobre la eficacia del cloro en el
tratamiento del agua en una piscina, es un hecho innegable que es eficaz y seguro en su empeño, como también lo es que nuestras particulares estadísticas nos demuestran que 10 de cada 12 propietarios de piscina emplean
incorrectamente el cloro y que 7 de cada 12 propietarios llevan el agua de su piscina hasta límites calificables de "criminales".
Es típico el comentario entre los defensores del cloro, que desde su invención
ha salvado más vidas en todo el mundo que con el empleo de los antibióticos. Esa aseveración es cierta... para los tratamientos de aguas de redes públicas, sobre todo en países subdesarrollados o en crisis
ambientales (huracanes, terremotos, etc). No obstante no se puede aplicar al mundo de la piscina, sencillamente por que si no hay más accidentes de gravedad de directa relación con el cloro, es porque hay que empezar a
creer en los Angeles de la Guarda.....
El cloro en las redes de saneamiento públicas presenta más ventajas que inconvenientes. Generalmente debido a que el agua es "corriente". En una piscina el agua es
ABSOLUTAMENTE ESTANCADA. El procedimiento desinfectivo es idéntico, pero las condiciones radicalmente diferentes.
Una piscina contiene la misma agua durante meses o años. Es fácil entender que para
procurar una cloración efectiva en todo momento, algunos compuestos residuales tenderán a aumentar con el tiempo, y esto genera serios problemas que en algunos casos son IMPOSIBLES de solucionar. Por ejemplo, el
ácido cianúrico..
Hay que pensar, que por ejemplo el ácido cianúrico (que forma parte de los DICLOROS y TRICLOROS) aumenta su concentración cada vez que dosificamos pastillas o granulado de esos productos.
El cloro es temporal por su naturaleza y por ello hay que ir dosificando más a medida que pasa el tiempo.
Por desgracia, en nuestro sector NO HAY suficientes profesionales que sepan aconsejar/asesorar
sencillamente porque sus conocimientos son NULOS. Es típico acudir a una tienda de piscinas con un problema y salir con soluciones que se basan en dosificar toda una parafernalia de productos químicos, que ne realidad
lo que hacen es AUMENTAR la magnitud del problema.
Otro de los aspectos MAS IMPORTANTES
del empleo del cloro como sistema desinfectivo es la falta de conocimientos de cómo actúa física y químicamente y que condicionantes afectan a su eficacia. |
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CLORO, UN POCO DE ANALOGIA: Podemos comparar un poco someramente el cloro con la gasolina de nuestros coches: A medida que la piscina se emplea, el cloro es demandado para ir eliminando
contaminantes, y va dejando un residuo que se denomina CLORAMINAS o cloro combinado (con materia orgánica). En nuestro coche la gasolina deja como residuo básicamente dioxido de carbono y monoxido de carbono
(aparte de otros). Ahora imaginémosnos a nuestro coche que lo dejamos en marcha en un garaje cerrado, como ocurre en una piscina (agua estancada). No hace falta ser demasiado lúcido para entender que
cuando se acabe el oxígeno, el motor se parará y no habrá forma de encenderlo de nuevo. En nuestra piscina ocurre exactamente los mismo: |
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el exceso de cloraminas llega a colapsar la eficacia del cloro libre, pero antes que eso, podemos llegar a unos niveles críticos, cuya primera
reacción es la de ser un sub-producto altamente TOXICO, IRRITANTE y reconocidamente CANCERIGENO.
¿SE PUEDEN EVITAR LAS CLORAMINAS? ¿COMO?
Se evita sencillamente ANALIZANDO el agua con sistemas diferenciadores del cloro libre y cloraminas (con reactivos DPD). Dado que es INEVITABLE la formación de
cloraminas, no hay más remedio que convivir con ellas, pero controlando su concentración y actuando en consecuencia cuando el nivel llegue a un límite "intolerable". El control se realiza simplemente con tratamientos de
choque (de punto de ruptura, es más correcto). Cuando el nivel de cloraminas llega a 0.3mg/l se erradican dosificando CLORO a esa cantidad multiplicando por DIEZ el contenido de cloro libre. Eso nos deja que el agua
de la piscina en ciertas épocas alcanza los 3.0mg/l, lo cual es alto pero admisible.
Aparte de todo lo explicado ahora, poca gente sabe por qué es tan importante mantener el pH del agua de una piscina dentro
de unos valores determinados: muchos piensan que es para evitar que "salga la cal", sea "más suave para la piel" o cosas más extrañas....
El cloro libre se expresa como la cantidad de ACIDO HIPOCLOROSO
disponible en el agua. En efecto, el cloro (en forma "pura") al entrar en contacto con el agua, se hidroliza formando ácido hipocloroso (HOCl) + ión hipoclorito (OCl): |
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El ácido hipocloroso (HOCl) es el VERDADERO agente desinfectante. El ión hipoclorito (OCl) NO lo es.
Desgraciadamente, el pH es el agente determinante de la CONCENTRACION de uno u otro en nuestra piscina. |
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En el gráfico adjunto, se puede apreciar que con un valor del pH de 4 (agua muy ácida), la cantidad de ácido hipocloroso presente es del 100%, lo
cual es perfecto, si no fuera por el pH tan agresivo que no nos permitiría bañarnos. En el otro extremo, vemos que con un pH de 11 (agua muy alcalina), el 100% se corresponde a ión
hipoclorito, lo cual es fatal a nivel de desinfección.
Si observamos bien, en los márgenes de pH que son necesarios para nuestra piscina por motivos de salud y de mantenimiento, a un
pH de valor 7.0 la concentración del benigno HOCl es del 75.2% del cloro libre que podemos exteriormente analizar.
A un pH de 7.5 el eficaz HOCl decrece hasta el 48.93%!! A pH 8 cae hasta
el 23.2%!! Así pues, queda claro en que rango de pH conviene mantenerse situados: entre 7.0 y 7.2 |
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Gráficamente podemos describir que obtendremos la misma eficacia con 1.0mg/l de cloro libre a pH 7.0 que con 3.3mg/l a pH 8.0
Ahora, si Ud ha leido hasta aquí, haga un ejercicio de honestidad, y reconozca cuantas veces la mantenido el nivel del pH en los valores FUERA del rango UTIL para el cloro... eso le aclarará el porqué en
algunas ocasiones con niveles de cloro "altos" ha tenido problemas con su piscina (algas, turbiedad, etc..) |
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Como puede ver, el mantenimiento de una piscina con cloro no es tan fácil como lo pintan "piscineros", fabricantes y distribuidores de nuestro
sector. Piense que esto es la punta del ICEBERG. Queda por hablar de los anteriores apartados en mayor profundidad, así como de otros aquí no explicados, por ejemplo: -Los tratamientos de choque con o SIN cloro.
-El control y entendimiento del ácido cianúrico (importantísimo). -La inutilidad en la mayoría de las ocasiones de emplear cloros "multiefectos".
-La innecesaria "mania" de emplear "altialgas" para erradicar las algas. -La futil eficacia de la mayoría de los productos "milagrosos" que no hacen si no esquilmar la economía doméstica. -Etc...
Nos
gusta decir, que si el 100% de los propietarios de piscinas que emplean el cloro, lo empleasen sólo al 50% de su correctitud, la industria química que rodea al cloro y sus aplicaciones en piscinas, caería a un 25% de
las ventas actuales..... (ello aparte de un importante ahorro para los centenares de miles de propietarios de piscinas en nuestro país, supondría una mejoría en las condiciones de salud y globalizando, en nuestro medio
ambiente)
RECUERDE SIEMPRE QUE Su piscina sólo necesita: de 0.6 a 1.5mg/l de cloro libre a pH entre 7.0 y 7.2, de 15mg/l a 25mg/l de ácido cianúrico
y una alcalinidad total entre 70mg/l y 120mg/l. La dureza cálcica entre 200 y 400mg/l. (Aunque a veces es "sostenible" valores superiores)
Como ve, lo PRIMERO que necesita son las herramientas de analítica. Los productos químicos... después. |
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